En un telegrama el Papa Francisco expresa su dolor por el asesinato ayer del embajador italiano, del carabinero de la escolta y del conductor del convoy atacado por los rebeldes en la República Democrática del Congo. El Pontífice expresa también sus condolencias a los familiares de las víctimas, “por la muerte de estos servidores de la paz y del derecho”.
El Papa recuerda además “el testimonio ejemplar del Embajador, persona de marcadas cualidades humanas y cristianas, siempre generoso en tejer relaciones fraternas y cordiales, para el restablecimiento de relaciones serenas y concordantes en el seno de ese país africano”. Como también “la del carabinero, experto y generoso en su servicio y próximo a formar una nueva familia”.
Francisco finalmente eleva “oraciones de sufragio por el eterno descanso de estos nobles hijos de la nación italiana” y exhorta a confiar “en la providencia de Dios, en cuyas manos no se pierde nada del bien realizado tanto más cuando se confirma con el sufrimiento y el sacrificio”. “A usted, señor Presidente, a los familiares y a los colegas de las víctimas y a todos los que lloran por este luto – concluye el telegrama – les envío de corazón mi bendición.